Sí, te joderé la vida, he ahí mi misiva, nacida en probetas asépticas pero puercas hicieron de mí todo un negocio lucrativo y asesino porque doy felicidad y estoy buena.
Una calada, amarga o no, una tras otra, con consumiciones y sin condón, iyección, ha de acabar la lírica sacada del vertedero y yo haré que tú pases de basurero al vertedero, desperdicio humano, tu vida en mis manos corre y se esfuma, desaparece y hace sufrir, desinhibición es mi ambición.
Calor en la nuca, vómito y violaciones, todo eso tengo que soportar, si yo sólo quería dar alegría e hicieron de mi un arma maligna.
Y al final de todo ¿qué queda?
Enfermedades venéreas.
Mararia, hoy me siento muy droguística-cocainística.